La nube de ceniza provocada por la erupción de un volcán islandés el pasado miércoles continúa avanzado y ya ha llegado a Asia. El viento es el responsable de la dispersión de estas partículas que al parecer continuarán girando hacia el sureste, aunque la Agencia Estatal de Meteorología ha asegurado que no llegará a España. Según los expertos, sin embargo, es imposible predecir cuándo terminarán los problemas ocasionados por esta columna de humo.
La erupción de este volcán, que es la segunda que se produce durante el último mes y ha lanzado a la atmósfera una columna de ceniza de entre seis y once kilómetros de altura, podría remitir en los próximos días aunque las cenizas continuarán a la deriva en el cielo europeo.
Las partículas aún no han comenzado a depositarse en la superficie terrestre, pero cuando suceda los riesgos para la salud pueden aumentar, sobre todo, según ha asegurado la Organización Mundial de la Salud, para todas aquellas personas que tengan problemas respiratorios.
La erupción de este volcán, que es la segunda que se produce durante el último mes y ha lanzado a la atmósfera una columna de ceniza de entre seis y once kilómetros de altura, podría remitir en los próximos días aunque las cenizas continuarán a la deriva en el cielo europeo.
Las partículas aún no han comenzado a depositarse en la superficie terrestre, pero cuando suceda los riesgos para la salud pueden aumentar, sobre todo, según ha asegurado la Organización Mundial de la Salud, para todas aquellas personas que tengan problemas respiratorios.
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